lunes, 25 de febrero de 2013

El invierno en Lisboa, de Antonio Muñoz Molina



[...En mi memoria aquel verano se resume en unos pocos atardeceres de indolencia, de cielos púrpura y rosa sobre la lejanía del mar, de prolongadas noches en las que el alcohol tenía la misma tibieza que la llovizna del amanecer...]

ATT. ANTONIO MUÑOZ MOLINA


"El imbécil" y Manolito Gafotas nos presentaron una anodina tarde de domingo, de esas en las que no apetece salir a la calle pero agobian las cuatro paredes de la habitación y decides coger cualquier libro que te hayan recomendado fervientemente para escapar. Apenas recuerdo los prolegómenos. Tan sólo sé que ingerí la tisana de letras versadas en lo que tú veías en Manhattan desde sus ventanas y deseé presenciarlo por mí misma sin testigos de cargo. Era un lenguaje plúmbeo, aunque no lo suficiente como para impedirme volar hasta allí. Tampoco para, posteriormente, seguirte hasta Lisboa sin un atisbo de conocimiento sobre lo que encontraría en aquella ciudad durante la estación invernal. Si acaso el Premio de la Crítica Literaria, el Premio Nacional de Literatura (1988) y tu consagración como Académico desde 1995 en la RAE.  Y un texto que sería llevado al cine por Jose Antonio Zorrilla, con el trompeta Dizzy Gillespie y actores españoles de peso como Eusebio Poncela o Fernando Guillén.

«Existe un momento en las separaciones en el que la persona amada ya no está con nosotros», arguye Flaubert en La educación sentimental y tú rememoras en el prólogo.


Homenajeas al cine «negro» americano logrando, a través de un soberbio manejo del lenguaje, sumergirnos en noches de bourbon y humo de cigarro a ritmo de jazz, con algunos guiños a Casablanca y empleando un hilo conductor en base a la tensión pasional de dos personajes: Santiago Biralbo y Lucrecia, y la red mafiosa que les atrapa. Sin embargo, en ocasiones tu dominio te juega malas pasadas, ya que tanto el preciosismo como la reiteración de ideas sugerentes empleadas obligan a que el lector continúe a tu lado a contracorriente en lugar de permitirle fluir. Por otro lado, el nudo y el desenlace prácticamente entroncan al final de la historia por lo que, ante tanto obstáculo que esquivar, entiendo que muchos de tus seguidores den por finalizado el camino previa llegada a la meta.


En cualquier caso, y aunque el lector se detenga a mitad del cénit de esta obra maestra, el mismo trayecto no le dejará indiferente por descripciones como la siguiente: «en las mañanas de los domingos invernales hay en ciertos lugares de Madrid una apacible y fría luz que depura como en el vacío la transparencia del aire, una claridad que hace más agudas las aristas blancas de los edificios y en la que los pasos y las voces resuenan como en una ciudad desierta».

EDITORIAL Y PRECIO

Podéis encontrarlo en tapa blanda en biblioteca breve por 6,60 € y en versión kindle por 5,69 €.


Dizzy Gillespie
Entrevista a Antonio Muñoz Molina


jueves, 21 de febrero de 2013

El mundo, de Juan José Millás

[...El frío de la infancia no se va nunca. Si acaso, se enquista en los penetrales del cuerpo, desde donde se expande por todo el organismo cuando le son favorables las condiciones exteriores...]


Tenía inmensas ganas de leerte. Me habían hablado de ti, de tu obra, pero no había encontrado el momento oportuno para dedicarte el tiempo que mereces. En ocasiones, la rueca de la inercia te atrapa hasta un punto en que se antepone a tus apetencias, como una cita ineludible que relega en una voluta de humo todo aquello por lo que realmente vale la pena existir, sometiendo a su insensata dictadura aromas, sonidos, tactos, sabores y colores que pasan inadvertidos hasta que se transforman en recuerdos. De hecho, antes que tus letras, fueron tus palabras en boca del actor Juan Diego interpretando el guión de La Lengua Madre. ¿Por qué únicamente un telón del 9 de enero al 3 de febrero del 2013? ¿Por qué un mes para dar a conocer un pensamiento férreo sobre un mundo en el que las palabras han dejado de ser genuinas para estar sometidas  al capitalismo? Como bien dices, nos encontramos en una época en la que la Sanidad Pública no es Sanidad, ni Pública, en la que la Justicia Gratuita no es Justicia, ni Gratuita, en el que la Educación Pública no es Educación, ni Pública. Sin embargo, las palabras en manos de intereses políticos se convierten en morbosos argumentos propagandísticos vacíos de contenido y con una melodía significativa.


Las palabras dirigen la vida de los hombres. Es cierto el ejemplo que expones en tu monólogo llevado al teatro: ni siquiera los mayores dictadores de la Historia Universal hicieron amago de cambiar el orden alfabético. Hitler siempre estará el octavo puesto, Franco en el sexto. Sin embargo, y a pesar de ello, tal vez fuese cuestión de economizar el tiempo o blandir espadas contra el viento lo que animó a tales seres abyectos a mantener la linealidad paradigmática del abecedario, en lugar de la fuerza incalculable del mismo. Los hombres sí dirigen la vida de las palabras, las moldean a su antojo independientemente de diccionarios o normas lingüísticas. Las utilizan como moneda de cambio, las vejan y anulan, moldean su significado y adornan su significante, las escupen y pisotean, las crean, las elevan al infinito. No hace mucho utilizábamos la «y» griega cuando ahora utilizamos la «ye». Y, si España no tuviese «eñe», albergo serias dudas de que mantuviésemos la virgulilla en pos de los americanos.


[...La presión del tópico me empuja a decir que mi padre se relacionaba con sus herramientas como si fueran prolongaciones de su cuerpo, un conjunto de prótesis. Del mismo modo que el lenguaje nos utiliza y nos moldea hasta el punto de que, más que hablar con él, somos hablados por él, mi padre parecía hablado por las herramientas que tenía siempre al alcance de sus manos...]

LO QUE DICE LA CRÍTICA

El Mundo, del novelista Juan José Millás galardonado con el Premio Planeta 2007 y Premio Nacional de Narrativa 2008.

EDITORIAL Y PRECIO

Puedes encontrarlo en la editorial booket logista (tapa blanda) por 8,51 € y en kindle por 7,12 €.

Entrevista a Juan José Millás